Las cervezas Irish Stout son similares a las Porters. En sus orígenes, tenían más fuerza y cuerpo. Son oscuras debido a los ingredientes que se usan en su elaboración: ya sea cebada tostada  o maltas chocolate, oscuras o especiales. El aroma también es tostado, similar al café o al chocolate.

 

El aroma moderado a café es el que más predomina en las Irish Stouts, aunque también pueden tener unas notas de chocolate negro, cacao o grano tostado. La presencia de ésteres es de moderadamente baja a inexistente. El aroma a lúpulo, por su lado, es entre bajo e inexistente, con reminiscencias terrosas o florales.

 

De origen portuario, el estilo fue evolucionando para intentar igualar el éxito de las London Porters, pero originariamente eran cervezas con mucho cuerpo y fuerza. La Irish Stout se apartó definitivamente de las London Single Stouts (o simplemente Porters) a finales de 1800, poniendo énfasis en las maltas oscuras.